Chile, cuerpo calado, sandía-calada. Autora: Rose Bru
En estos momentos, en los cuales se disputa la elección del cargo de gobernadores/a resulta acertado meditar sobre descentralización política y económica. Hoja en Blanco expone su especial interés en este tema a la luz de los desafíos que impone la nueva Constitución, pero especialmente en atención a la ciudadanía movilizada de las diversas regiones de nuestro país que también aspira a un cambio real.
La Nueva Constitución deberá contemplar una efectiva descentralización política y económica, garantizar la participación directa y deliberativa de la ciudadanía en todos los ámbitos del quehacer local y regional.
 
Para este efecto, las organizaciones civiles tales como sindicatos, agrupaciones empresariales y de comercio, colegios profesionales, agrupaciones académicas universitarias, juntas de vecinos, agrupaciones ambientales y territoriales y otros grupos de interés, en conjunto con las autoridades electas, participarán de Consejos de Desarrollo Económico Social, instancias que aprobarán los respectivos presupuestos anuales, planes de desarrollo regionales, así como los planes reguladores y de desarrollo comunal.
 
La elaboración a nivel comunal y regional de desarrollo a mediano y largo plazo, deberán incorporar las capacidades de cada región, tanto naturales como humanas para posibilitar un desarrollo armónico y sustentable, impulsando así un avance científico, tecnológico y cultural del país en su totalidad. Se priorizará generar iniciativas que utilicen recursos existentes con alto valor agregado, potenciando industrias de alta calidad y amigables con el medioambiente.